El sobre bomba destinado al Concejal Hugo García sería utilizado para tres atentados contra políticos
Uno de los criminales más famosos e importantes del país, Mario Segovia, conocido como “el rey de la efedrina” quien afirmó tener vinculaciones con el ex senador Aníbal Fernández, sería el que ordenó la compra del sobre bomba interceptado el 15 de septiembre pasado en el aeropuerto “Silvio Pettirossi”, según la confesión hecha por un paraguayo capturado por el caso.
La revelación fue hecha por Yanny Alcides Zárate Jara, de 35 años, detenido por policías antisecuestro, en las inmediaciones del aeropuerto internacional del Paraguay.
Zárate es un paraguayo, pero residente en el país, y fue quien hizo todas las gestiones para comprar por Internet en Canadá un paquete bomba que a su vez contenía tres dispositivos explosivos escondidos dentro de un sobre, un libro y otro paquete más chico.
El paquete fue embarcado en Canadá, por la empresa de seguridad Secure Search Inc. Esta firma canadiense, de hecho, no vende este tipo de productos peligrosos a particulares, sino solamente a representantes de los Gobiernos.
La mercadería hizo una primera escala de tránsito en el pais y, finalmente, fue a Paraguay, donde a través de una empresa de courier debía ser entregada al cuñado de Yanny Zárate, Denis Javier Pérez (37).
Este último, ahora detenido, a su vez, tenía que entregar el paquete con las bombas a una amiga en común de ambos, la azafata de colectivos Kenia Danisse Johana Acosta Barrios (24).
La mujer, actualmente con arresto domiciliario, debía llevar el paquete en un bus, hasta Buenos Aires, para entregárselo a su amigo Yanny Zárate y que este finalmente le acerque la peligrosa encomienda en la cárcel al criminal Mario Segovia.
Finalmente, de acuerdo a los datos manejados por los investigadores, las bombas iban a ser utilizadas para tres atentados en el país, en los cuales los objetivos eran políticos cuyos nombres no dieron a conocer.
Mario Segovia, alias “El gordo” o “El rey de la efedrina”, es un famoso criminal argentino capturado en 2008, quien admitió públicamente que operaba con la “bendición” del ex senador Aníbal Fernández pero cuando formaba parte del gabinete del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y, según Segovia, era el verdadero patrón del negocio del tráfico de efedrina, gracias al cual supuestamente fueron financiadas varias campañas políticas.
Supuestamente, la red de Mario Segovia mantiene amenazados a los paraguayos que “perdieron” el sobre bomba que ordenó comprar. Fuente ABC
Zárate es un paraguayo, pero residente en el país, y fue quien hizo todas las gestiones para comprar por Internet en Canadá un paquete bomba que a su vez contenía tres dispositivos explosivos escondidos dentro de un sobre, un libro y otro paquete más chico.
El paquete fue embarcado en Canadá, por la empresa de seguridad Secure Search Inc. Esta firma canadiense, de hecho, no vende este tipo de productos peligrosos a particulares, sino solamente a representantes de los Gobiernos.
La mercadería hizo una primera escala de tránsito en el pais y, finalmente, fue a Paraguay, donde a través de una empresa de courier debía ser entregada al cuñado de Yanny Zárate, Denis Javier Pérez (37).
Este último, ahora detenido, a su vez, tenía que entregar el paquete con las bombas a una amiga en común de ambos, la azafata de colectivos Kenia Danisse Johana Acosta Barrios (24).
La mujer, actualmente con arresto domiciliario, debía llevar el paquete en un bus, hasta Buenos Aires, para entregárselo a su amigo Yanny Zárate y que este finalmente le acerque la peligrosa encomienda en la cárcel al criminal Mario Segovia.
Finalmente, de acuerdo a los datos manejados por los investigadores, las bombas iban a ser utilizadas para tres atentados en el país, en los cuales los objetivos eran políticos cuyos nombres no dieron a conocer.
Mario Segovia, alias “El gordo” o “El rey de la efedrina”, es un famoso criminal argentino capturado en 2008, quien admitió públicamente que operaba con la “bendición” del ex senador Aníbal Fernández pero cuando formaba parte del gabinete del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y, según Segovia, era el verdadero patrón del negocio del tráfico de efedrina, gracias al cual supuestamente fueron financiadas varias campañas políticas.
Supuestamente, la red de Mario Segovia mantiene amenazados a los paraguayos que “perdieron” el sobre bomba que ordenó comprar. Fuente ABC
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